Panamá, 22 de julio de 2020. – La Dirección General del Sistema Penitenciario (DGSP) llegó a su aniversario 78 con la misión de resocializar a las personas privadas de libertad, garantizando la aplicación de los derechos humanos y dignidad, con miras a brindar oportunidades de reinserción.
La celebración no pasó desapercibida en un acto que se realizó en el Centro Penitenciario Llano Marín, provincia de Coclé, cumpliendo todas las medidas de bioseguridad y distanciamiento establecidas por el Ministerio de Salud (Minsa).
La ministra de Gobierno, Janaina Tewaney Mencomo, señaló que el Sistema Penitenciario se centra en dos ejes: seguridad y resocialización, este último punto que se encuentra dentro del plan de Gobierno del presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen, porque una persona privada de libertad resocializada, es un talento que recupera la sociedad.
“Cuando se priva a una persona de su libertad, no es para torturarlo o sacarlo, sino para imprimir en ellos esos valores que son necesarios en ese pacto social con la sociedad y creemos en la resocialización, y avanzamos para salir de un Estado represor, para convertirnos en uno que da oportunidades”, manifestó la titular de Gobierno.
Carlos González Rojas, director General encargado, felicitó a todo el personal administrativo, técnico y custodio, por la labor diaria y envió un mensaje de trabajar en equipo, con disciplina, honestidad y transparencia, para de esta forma lograr los objetivos de la institución.
Por la eficiencia en el trabajo, fueron galardonados quince funcionarios del Sistema Penitenciario en las categorías de puntualidad y trabajo en equipo, adicional privadas de libertad de Llano Marín declamaron la poesía Invictus y se expusieron los trabajos de costura y ebanistería que realizan los reclusos en la marca Integrarte.
Participó de la actividad el gobernador de Coclé, Renault Domínguez, así como autoridades del Benemérito Cuerpo de Bomberos, Minsa Ministerio de Desarrollo Agropecuario.
Tanto la ministra Tewaney Mencomo y González Rojas, aprovecharon la estancia en el centro para recorrer los diversos programas de agricultura, Casa Granja, talleres de ebanistería y dialogaron con los reclusos y reclusas que están en el sitio, de forma separada.