Es importante en la resocialización de las personas privadas de libertad el área espiritual, por ello la Dirección General del Sistema Penitenciario (DGSP), en coordinación con la Pastoral Penitenciaria de la iglesia Católica, realizó un acto en el centro penitenciario de Llano Marín, para abrir un compás y permitir a la población en reclusión, tener un encuentro personal de fe en el camino hacia la reinserción social.
Cinthia Novoa, subdirectora General del Sistema Penitenciario, recalcó que, dentro del proceso de rehabilitación, es fundamental la parte espiritual en cada individuo; por ello, agradeció la presencia de la Iglesia Católica, que respalda ese crecimiento de las personas privadas de libertad a través de la labor de evangelización.
El padre Francisco Palomares, de la Pastoral Penitenciaria, manifestó que se tiene en cuenta a la población penitenciaria para comunicarles ese amor de Dios hacia sus hijos, adicional se les donó dos televisores para el área masculina y femenina, los cuales se utilizarán en las actividades diarias del centro.
La privada de libertad Giselle Caribe manifestó sentirse agradecida que sean tomadas en cuenta en los programas de resocialización y en esta ocasión con la parte espiritual, que es significativa para las condiciones en que se encuentran. “En la vida hay que tener objetivos claros, ver lo positivo para seguir adelante”, expresó la privada.
