Panamá, 23 de noviembre de 2018. – La Dirección General del Sistema Penitenciario (DGSP), por lapso de 10 años, ha mantenido el proceso de sensibilización de las privadas de libertad para erradicar todo tipo de violencia contra las mujeres, esto mediante la Campaña Únete que impulsa las Naciones Unidas desde el 25 de noviembre de 2008.

Para la conmemoración de esta campaña, el Sistema Penitenciario, en coordinación con la Oficina de ONU-Mujeres, realizó un acto protocolar en el Centro Femenino de Rehabilitación “Cecilia Orillac de Chiari” (CEFERE) con la presencia de un aproximado de 50 mujeres privadas de libertad.

Elena Montañez, jefa de Atención a Mujeres Privadas de Libertad, indicó que al unísono se efectúan actividades en los centros penitenciarios Nueva Esperanza, provincia de Colón, Llano Marín, en Coclé y Los Algarrobos, Chiriquí, para celebrar la lucha que han tenido las mujeres, donde se les invita a denunciar la violencia y convertirlas en entes multiplicadores para evitar ser víctimas de cualquier tipo de maltrato.

De igual forma, Dayana Salazar, de ONU-Mujeres, manifestó que el Ministerio de Gobierno (MinGob), mediante el Sistema Penitenciario, ha tenido ese sentido de responsabilidad y por 10 años mantiene viva la campaña, por ello se confeccionó un video que capta las vivencias de las privadas de libertad del CEFERE.

La filmación se mostrará desde hoy globalmente para que se pueda replicar la iniciativa en otros países.

Asimismo, la privada de libertad Jaginska Appleton, quien participa del programa Mi Voz para tus Ojos, detalló que el empoderamientos de las reclusas en la Campaña Únete es movido por el sentimiento de saber que fuera de las cárcel hijos y familiares pueden estar en riesgo social y los conocimientos que se adquieran en las capacitaciones son importantes como método de prevención.

La Campaña «Únete» se distingue por el color naranja y conmemora el 25 de noviembre, sin embargo, todos los 25 de cada mes se realizan actividades en los centros penitenciarios femeninos del país, para sensibilizar y renovar el compromiso de ejecutar medidas concretas para mejorar las condiciones en las que viven las mujeres privadas de libertad.